¿Qué es la aterosclerosis? Información sobre causas, síntomas, signos, prevención y tratamiento de la aterosclerosis.
Aterosclerosis; es una enfermedad en la que depósitos de colesterol y otras sustancias grasas recubren las paredes de las arterias. Al principio, estos depósitos involucran solo la capa más interna de la pared de la arteria, pero a medida que la enfermedad progresa, afectan toda la pared, lo que hace que se vuelva gruesa e inelástica y estreche el canal a través del cual fluye la sangre.
En las etapas avanzadas de la aterosclerosis, pueden ocurrir diversas complicaciones. Una de las complicaciones más graves se produce cuando se forma un coágulo de sangre en la arteria estrechada. A menos que el coágulo se disuelva o se extraiga mediante cirugía, puede cortar el flujo de sangre al tejido que normalmente suministra la arteria, lo que provocaría la muerte del tejido afectado. Este tipo de complicación ocurre a menudo en las arterias principales que llevan sangre al cerebro y a las extremidades. También ocurre con frecuencia en las arterias coronarias, los pequeños vasos sanguíneos que irrigan el tejido cardíaco, y es una de las principales causas de ataques cardíacos.
Causas:
No existe una causa única de aterosclerosis. En cambio, la enfermedad tiene muchas causas, y los diversos factores tienen diferentes roles relativos en diferentes personas. La dieta es generalmente un factor clave. Se ha descubierto que las dietas ricas en calorías, grasas saturadas, colesterol, azúcar y sal desempeñan un papel importante en la producción de varios de los rasgos y anomalías que intensifican el proceso de la enfermedad. Entre estas anomalías se encuentran la obesidad, la hipertensión arterial, la diabetes mellitus y los niveles elevados de colesterol y otras sustancias grasas en la sangre. Los cuatro de estos rasgos son factores de riesgo importantes; su presencia está asociada con un aumento significativo en la probabilidad de desarrollar una enfermedad aterosclerótica.
El tabaquismo es otro factor de riesgo importante y la falta de ejercicio también aumenta la tendencia de una persona a desarrollar la enfermedad. Otros rasgos que han sido implicados incluyen altos niveles de ácido úrico en el plasma sanguíneo y ciertos rasgos de personalidad y patrones de comportamiento. Además, se ha descubierto que la susceptibilidad a la aterosclerosis puede heredarse. Una persona cuyos parientes cercanos padecen la enfermedad prematuramente tiene más probabilidades de desarrollar aterosclerosis que una persona sin antecedentes familiares de la enfermedad.
Síntomas:
Los síntomas de la aterosclerosis varían mucho, según el órgano afectado y la gravedad de la afectación. A menudo, la enfermedad está presente durante años pero no produce síntomas. Cuando la enfermedad finalmente se desarrolla, con frecuencia toma la forma de una enfermedad cardíaca, generalmente un ataque cardíaco, insuficiencia cardíaca o angina de pecho (malestar en el pecho provocado particularmente por el ejercicio, las comidas o la excitación). El accidente cerebrovascular es otra manifestación importante de la aterosclerosis. Además, la enfermedad puede producir presión arterial alta, especialmente si afecta las arterias que irrigan los riñones. Si la enfermedad afecta las arterias principales que irrigan las piernas, puede producir dolor en las pantorrillas de las piernas después de caminar.
Prevención y tratamiento:
Como resultado de nuestro conocimiento de las causas de la aterosclerosis, la enfermedad a menudo se puede prevenir. Casi siempre se pueden evitar o corregir las dietas ricas, los hábitos sedentarios y el tabaquismo. Los niveles altos de colesterol y ácido úrico en sangre, así como la hipertensión, la obesidad y la diabetes, se pueden detectar en la edad adulta temprana y, por lo general, se pueden controlar mediante dietas especiales, medicamentos o ejercicio. La creciente evidencia indica que este enfoque es efectivamente efectivo. También es eficaz en la atención a largo plazo de pacientes que se han recuperado de uno o más episodios de enfermedad aterosclerótica, con el fin de prevenir ataques recurrentes.
Una vez que la enfermedad aterosclerótica está presente, existen muchas formas de tratamiento para brindar alivio y ayuda al paciente. Estas medidas incluyen reanimación cardíaca a pecho cerrado y cuidados intensivos para los pacientes durante los primeros días después de un ataque cardíaco. Para los pacientes con angina de pecho, existen varios medicamentos (por ejemplo, nitroglicerina) para aliviar el dolor y dilatar el corazón y las arterias coronarias. Los fármacos digitálicos y diuréticos son útiles para los pacientes con insuficiencia cardíaca, y se pueden usar anticoagulantes para prevenir la formación de coágulos de sangre. Se pueden utilizar varios dispositivos electrónicos para interrumpir episodios de ritmos cardíacos anormales o para estimular el corazón (establecer una frecuencia cardíaca adecuada) cuando late a una frecuencia anormalmente lenta. Además, existen procedimientos quirúrgicos que pueden usarse para hacer que la sangre pase por alto las arterias ateroscleróticas severas, restaurando el flujo normal de sangre a los órganos vitales.