¿Cuándo y cómo se inventó de los Paracaídas? La historia de los Paracaídas. Información sobre la invención y desarrollo de los Paracaídas.
Historia de los Paracaídas
A lo largo de la historia, la raza humana ha tenido un deseo insaciable de volar por el aire. Aunque se logró a través de aviones y alas delta, el anhelo de la caída libre debía cumplirse. Por lo tanto, se requirió un paracaídas para ayudar con seguridad a estas personas que caen libremente al suelo.
La evidencia más temprana de paracaídas vino de Europa durante el período del Renacimiento de los años 1400. Se pueden encontrar numerosos bocetos y modelos en varios libros, incluidos algunos publicados por Leonardo da Vinci. Aunque principalmente extravagantes y totalmente inverosímiles, la mayoría de estos paracaídas hubieran provocado la muerte inminente de cualquiera que intentara usarlos. Las historias de este período mencionan lesiones y muerte debido a pruebas tempranas de paracaidismo.
Aunque alguna vez fue peligroso y mortal, el paracaídas moderno es relativamente seguro. El diseño de esta rampa se construyó por primera vez en 1793 cuando Louis-Sebastien Lenormand usó el dispositivo para saltar desde un edificio en Francia. A lo largo de los siglos XVIII y XIX, los paracaidistas trabajaron para compactar el dispositivo y aumentar la seguridad y la estabilidad del aterrizaje.
Hasta 1907, el paracaídas se utilizaba principalmente para fines de entretenimiento. Sin embargo, con la inminencia de la Primera Guerra Mundial, fue crucial que los militares desarrollaran paracaídas para los saltadores de aviones. El 1 de marzo de 1912, el capitán del ejército estadounidense Albert Berry intentó el primer salto en paracaídas desde un avión de ala fija. Usando un paquete de paracaídas pegado a su espalda, realizó un exitoso salto sobre la ciudad de St. Louis Missouri. Poco después, este diseño fue utilizado en futuros saltos militares en todo el mundo.
Desde aquí, el desarrollo del paracaídas continuó fuerte durante la Segunda Guerra Mundial, así como las numerosas guerras a seguir. Hoy en día, el paracaídas se utiliza para fines militares y de entretenimiento. A medida que el paracaidismo se ha convertido en una actividad repetida para el placer y la necesidad, el uso del paracaídas se ha incrementado dramáticamente. Con su mayor demanda, el desarrollo y la seguridad también han mejorado, permitiendo que la raza humana vuelva a volar por el aire una vez más.